Independiente de la razón para buscar un médico, las personas esperan encontrar un individuo con don de gente, con la capacidad de comprender las necesidades ajenas y sobre todo quien los escuche de verdad en sus problemas. No quiero decir con esto que la enfermedad (o la causa de la consulta) pasa a ser un segundo plano, sino que buscan un apoyo que los acompañe durante la situación que están viviendo o que se avecina.
Desde mi experiencia y desde la experiencia de mis profesores (que dan consejos para que uno llegue a viejo), esa relación entre el médico y el paciente es el pilar fundamental para que las cosas empiecen y con seguridad, terminen bien. De nada sirve ser el mejor cirujano, si su ego choca y atropella a aquellos a los que debe ayudar. Tampoco es aconsejable convertirse en paciente de quien no se le tiene la confianza para hablar con libertad y preguntar mas de una, dos, incluso diez veces la misma pregunta para aclarar dudas.
Hoy en día está de moda consultar a varios cirujanos plásticos y al final decidir por el cirujano que mejor precio ofrece. Deben considerar que, aunque el factor dinero es importante, existen razones de mayor relevancia para escoger en manos de quien está confiando su salud y su vida. Como lo mencione anteriormente, la relación médico paciente debe ser una de las principales.