En épocas donde la economía está apretada, la mayoría de nosotros busca formas de ahorrar en gastos y tratar de sacar el máximo provecho a cada peso. La cirugía plástica estética aunque accesible, no es un gasto indispensable ni el más económico
Por eso se entiende que el costo de una intervención (quirúrgica o no quirúrgica) es un factor importante en la toma de decisión, de con quien y en donde realizarse un procedimiento.
Sin embargo, es fundamental entender que aunque se trata de un procedimiento electivo, sigue siendo un evento muy serio, en el cual además de confiar una suma de dinero, se está confiando la salud y la apariencia física. En este proceso se involucran numerosos elementos para alcanzar resultados de alta calidad con la mayor seguridad.
Estos elementos se ven reflejados en el precio, por lo tanto debe estar consciente que el dinero no puede ser el único criterio que influencie su decisión. Un cirujano plástico reconstructivo y estético (únicos con el entrenamiento necesario y únicos autorizados para realizar intervenciones quirúrgicas de carácter estético) responsable y con criterio, no tomará atajos para disminuir el precio a expensas del compromiso de la salud y del resultado estético.
La “mano de obra” calificada del cirujano y su grupo; el cuidado y atención que se recibe antes, durante y después del procedimiento; la calidad de la clínica donde se realiza el procedimiento, son sólo algunos de los factores que influyen para determinar el costo de una cirugía.
La seguridad es lo más importante y no debe ser negociable. A pesar de requerir mayores esfuerzos para lograr esto, uno como cirujano, nunca se arrepiente de tomar estas precauciones. Esto lleva a la investigación y la evolución de las técnicas, para que los procedimientos sean cada día más seguros.